Políticos y personas hablan de la discapacidad y discursean acerca de lo necesario que es apoyar a personas con capacidades diferentes. Es un lindo discurso, pero ¿quién trabaja realmente por los discapacitados?La mayoría de las personas que trabajan de verdad con discapacitados, generalmente están en el anonimato y se esmeran en pos de brindarles mejores condiciones de vida a personas que están disminuidas no sólo en su condición física, sino también su autoestima, por una sociedad que, incluso sin darse cuenta, los segrega y los discrimina.
Les contaré tres casos que conozco de personas que luchan para que los discapacitados logren apoyo y sean incluidos en nuestra sociedad.
El primero de ellos es Cristián Domínguez. Un Santiaguino radicado en La Serena hace 7 años aproximadamente y que por las casualidades de la vida conoció una realidad que le cambio la vida. Este "Don señor" tuvo el placer de conocer a un grupo de personas adultas con problemas psiquiátricos en la comuna de Coquimbo. La agrupación se denomina "Familiares Centro diurno Nuevo Despertar". Ellos están constituidos por unos 25 usuarios con diversos problemas relacionados a la psiquis. El panorama que se encontró fue un grupo humano especial carente no sólo de recursos, sino también de afectividad. El mayor problema que el considera aparte de la poca o nula ayuda que reciben es la discriminación que sufren estas personas incluso por sus propios familiares. Actualmente el sigue organizandoles paseos y/o apoyándolos con distintas acciones que vayan en beneficio de su inclusión en la sociedad.
El segundo caso es la "Kenita", una amiga que trabaja en Unpade La Serena, y que si bien ella es remunerada en este centro para personas con discapacidad intelectual hay que sólo hablar con ella para saber el compromiso que tiene con sus "niños". Ella me ha contado los esfuerzos que tienen que hacer para conseguir un poco de recursos. Desde Bingos, noches de tango, rifas, etc. y aún así los recursos son escasos. La angustia mayor que ella tiene es que la mayoría de los usuarios que atiende son personas de edad con familiares aún mayores y que pronto podrían quedar sólos en el desamparo.
El tercer caso que quiero distinguir es al grupo directivo de la Universidad Central, encabezado por su directora, Verónica Abbott. Ella está constantemente preocupada de ayudar a sus estudiantes con discapacidad y pone énfasis en eso. "Es un sello que tenemos como sede acá en La Serena. Conozco muy de cerca la realidad de la discapacidad física y creo que tener discapacidad en este país es casi una condena, ya que no se le da el apoyo necesario".
El año pasado este grupo directivo que también compuso Marcela Dafonseca y Mario Flores se esmeraron en realizar el mejor proyecto para el Fondo Nacional de la Discapacidad y entre cientos que postularon, el proyecto elaborado fue aprobado y distinguido.
"Hoy, gracias a este proyecto ganado, estudiantes tienen computadores portátiles, sistemas computacionales con sistema braille, mesas especiales y puertas de acceso con sensores de apertura y cierre".
Con esto quiero dar a conocer a un grupo de personas que sí se las juegan por la discapacidad y están realmente concientes de esta gran problemática.
Tú que tienes el poder, si tú... ¿Qué haces por ayudar de verdad a nuestros compatriotas chilenos que son discriminados por tener alguna discapacidad?
Pie de foto: Estudiantes con dicapacidad de la universidad Central quienes recibieron los recursos obtenidos a través del Fonadis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario